Y ésta sigue siendo Vetusta a las 3:37PM.

No mejora mucho la cosa. Con Humboldt en una mano, Deleuze calzando la mesa, y en la otra el mando, todo el día viendo a Mr. Brown. (Qué le vamos a hacer, me he enganchado al BBC Parliament, es tan divertido, todos venga a levantarse y sentarse... Mr. spokesman!).
Para las 3:55PM, ya está el mar asomando al cielo. Más o menos así:

Y hacia las cuatro en punto, ya podemos todos echar a volar.

Las nubes despliegan sus alas doradas, camino del Sur donde irán a pasar la noche junto a ti, callando su miedo de sombras. Y.... así, "por momentos -y de lejos- de la gente que sientes que podría estar cerca". Tienes razón. Siempre fue así. Lo sientes, pero da igual, están lejos, dear, son lejos, lejos es su forma de ser, lejos la manera en que nos los acerca la vida, en otro mundo que no es el nuestro, y que no debiéramos querer que fuera el nuestro. O sí, no sé. Lo hice tantas veces, por el mismo reflejo antiguo de "querer vivir sin dejar pasar lo que importa, quien importa", no pudiendo evitarlo, no sabiendo entender que la gente llega y se va, pasa un segundo, toca, está de vuelta en su vida. Nunca fue la nuestra. ¿O sí? Mientras sentimos que estaban cerca, mientras lo adivinábamos, que tal vez, quizá, pudieran estarlo. Cerca, aunque la vida se llame lejos. "Lo personal", sí. ¿Y qué?